Así es, un año.... He tardado un año en continuarlo... Y este es el segundo capítulo de este extraño fanfiction... Espero que os guste^^.
Hay va:
Capítulo II
Mientras, alguien sentía un vacío enorme en el estómago y cuando esto ocurría era difícil detenerlo, así que Sho se dirigía a la habitación que escasos minutos antes había abandonado Nino dejando a Ohno en sus profundos sueños. Sí, la comida se encontraba en el mismo sitio que Ohno como, lógicamente, se iba a separar él de uno de sus preciados tesoros.
Al principio no reparó en él, sabía que estaba allí pero no se fijó detenidamente. En gran parte lo admiraba por su creatividad y su talento en el dibujo, pero la admiración que sentían era mutua ya que Ohno admiraba a Sho por haber conseguido formar parte de un programa de noticias y que ya no era tan extraño poder entablar una conversación de cualquier tema porque leía mucho la prensa y se informaba sobre lo que ocurría a su alrededor.
Por fin pudo calmar su hambre con un buen bol de su delicioso pollo con curry y descansó su mirada donde yacía Ohno. Mientras su cabeza se llenaba de pensamientos notó que Ohno parecía más joven con el nuevo cambio de look, el rubio lo hacía más mayor y ahora con el moreno parecía el más joven de todos aparte de ser uno de los menos altos del grupo. Pensó Sho que los médicos, y en general, dicen que hay personas que hablan mientras duermen pero, ¿es posible que nuestro Líder sea capaz de hacer algo así? Sho se mantuvo de pie y comiendo mientras lo observaba y, de repente, Ohno comenzó a moverse y a pronunciar palabras que, al principio, no se entendían, así que Sho paró de comer, se acercó a él intentando interpretar lo que decía. Parecía como si estuviera hablando en otro idioma o en una lengua muerta de esas que habían desaparecido siglos atrás. Aquellas palabras se le hicieron familiares, como si ya las hubiera escuchado en boca de otro. Decidió sentarse a terminar su bol y esperar a que Ohno despertara, pero su tiempo era valioso y su paciencia tenía unos límites. Espero algo más de 20 minutos pero no aguantó y se marchó. En el momento en que salía por la puerta Ohno se despertó sobresaltado y lo llamó:
- ¿Sho? – Fue lo único que dijo estirándose que junto a un gran bostezo comenzó a despertarse.
Sho seguía en la puerta sin decir nada esperando algo más que oír sólo su nombre, algo como la explicación de aquellas palabras que había escuchado antes. Tenía la suficiente idea de a qué pertenecían y a quién más las había pronunciado pero por alguna razón estas dos personas NUNCA habían hablado del tema. Ohno sintió la llamada del hambre y se precipitó a la fuente de ramen que se haya en la mesa de la comida que estaba junto a la puerta.
De momento seguía en la comida pero notaba la presencia de alguien. Después del primer bocado dirigió su vista hacia la puerta. Sus miradas se cruzaron y por un momento el tiempo se detuvo a su alrededor.
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